Con 77 votos, Alejandro Soto Reyes se convirtió en el nuevo presidente del Congreso de la República y liderará la Mesa Directiva 2023-2024 junto a los congresistas Hernando Guerra García, de Fuerza Popular (primera vicepresidencia); Waldemar Cerrón, de Perú Libre (segunda vicepresidencia) y Rosselli Amuruz, de Avanza País (tercera vicepresidencia).
El hasta ahora vocero de Alianza para el Progreso (APP), de 63 años, fue presentador de un programa de televisión llamado Ronda Política. Ahí se hizo conocido porque, durante la campaña presidencial del 2021, por entrevistarse a sí mismo.
Soto logró un escaño con más de 29 mil votos y las primeras críticas que recibió fue por cuestionar que el salario de «10.200 soles» que recibía como congresista (con descuentos) no le alcanzaba.
Según informó El Comercio en diciembre, Alejandro Soto Reyes, registraba “17 carpetas fiscales activas, de las cuales 12 están en estado de dictamen en la fiscalía de Cusco, donde el legislador figura como imputado. Mientras que tiene un caso en investigación preliminar por presunta falsedad”.
Y el pasado 24 de julio, antes de su elección, el portal El Foco reveló que está como imputado en 59 casos. La nota precisa: «De ese número, 55 están abiertos, según el reporte. La gran mayoría de los casos vigentes, 57 de ellos, están situados en Cusco, región que representa. Los expedientes fiscales contra Soto datan de junio del 2000 hasta diciembre del 2022».
Algunos de los delitos que se le imputan son por estafa, apropiación ilícita, abuso de autoridad, enriquecimiento ilegal y corrupción.
Además, según un informe de Perú21, este legislador ha impuesto 14 querellas contra periodistas que lo mencionaron en algún reportaje o programa de televisión. De estas demandas cuatro son contra Miguel de la Cruz (Qosqo Times); cuatro contra Ronald Calvo (Qosqo Times); tres contra Karerina Bayona (CTC TV); una a Víctor Gutiérrez (CTC TV); y una contra Yessica Bazalar y Carlos Carrillo de Cusco en Portada.
En la hoja de vida que presentó ante el JNE, Alejandro Soto consignó una sentencia por delito de difamación, con reserva del fallo, del 8 de mayo del 2013, del Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria. También reportó otro fallo del 2014 en su contra, por haber cobrado dietas por sesiones de concejo no realizadas cuando fue regidor de la Municipalidad Distrital de Santiago, en Cusco.