El alcalde de Trujillo, Mario Reyna, opinó que, si el estado de emergencia en esta ciudad del norte del país no viene acompañado de inversión pública e implementación logística para la investigación criminal, escucha telefónica y observación, de poco o nada va a seguir y las bandas criminales seguirán operando como si nada.
De hecho, en estos primeros días del estado de emergencia los sicariatos han continuado como si nada y también se han reportado violentos robos con mano armada y los extorsionadores siguen poniendo explosivos en viviendas y comercios de la ciudad.
«Hay que fortalecer la logística de la Policía Nacional. La declaratoria de emergencia en el papel no sirve. Eso quedó demostrado con las anteriores, una declaratoria de emergencia debe venir acompañada de la habilitación para comprar rápido laboratorios de criminalística y adquirir equipos de interceptación telefónica», opinó.
Para la autoridad municipal, como ocurre cuando hay emergencias por desastres, en este estado de emergencia por inseguridad se debe permitir procedimientos cortos para procesos de compras. “El año pasado hemos tenido cinco estados de emergencia y ¿se ha solucionado en algo la problemática? La respuesta es no. Creo que vendrán más declaratorias de emergencia y no habrá grandes resultados”, dijo.
Agregó: «El estado de emergencia tiene que venir con más inversión pública. Creo incluso que la compra de camionetas no va a resolver el tema de la inseguridad. Un ladrón no va a robar viendo un patrullero o un policía cerca. Ahora el delincuente mejor te extorsiona o secuestra, ve la hora que no hay nadie y te deja una carta extorsiva o una dinamita».
Respecto a la inversión del Gobierno Nacional en sectores sociales, indicó que hay mucho por mejorar. «Las gestiones que pasaron no han trabajado por mejorar la estructura social y reducir brechas», aseveró.
QUÉ HACE LA MUNICIPALIDAD DE TRUJILLO
En cuanto a lo que viene haciendo la municipalidad, precisó que tienen un rol de prevención con seguridad ciudadana y a través de educación, cultura, el deporte, los espectáculos. Sin embargo, indicó que la criminalidad no pasa ya mucho por la calle, donde aún hay arrebatos o robo de accesorios de vehículos. “El gran problema ahora es el crimen organizado a través de la extorsión y eso solo se puede combatir con interceptación telefónica, a los mensajes de texto y llamadas extorsivas”, insistió.
Exigió seguidamente que se creen equipos o grupos especializados que se pongan a observar, a vigilar, rastrear y capturar. «Es la única manera para sostener de manera eficiente un caso ante el Poder Judicial. De lo contrario, vamos a seguir echándole la culpa al Ministerio Público y al Poder Judicial que sueltan a los ladrones, a los extorsionadores, pero la verdad es que vamos sin un caso sólido. Se tiene que empezar a plantear denuncias bien fundamentadas y documentadas”, aseveró.
La autoridad reconoció que en el tema de seguridad la municipalidad tampoco estuvo haciendo bien las cosas en las últimas gestiones, poniendo como ejemplo que en Trujillo solo se tenía 34 cámaras de video vigilancia hábiles, de las poco más de 40 que se tenía y que cuando hubo intervenciones de mejoras rompieron tuberías y cables de internet y que se estaban habilitando las que faltan.
“Solo la urbanización Las Capullanas tiene 45 cámaras, es decir más que la MPT. Es una vergüenza lo que han hecho en la ciudad. No queda más que trabajar, pero de manera seria. Hemos hecho recientemente una alianza con Las Capullanas y hay varias alternativas más para seguir mejorando la seguridad”, finalizó.