El Gobierno Regional de La Libertad anunció la futura construcción de un nuevo penal en una zona alejada de la sierra liberteña, con el objetivo de reducir el hacinamiento que actualmente enfrenta el establecimiento penitenciario El Milagro, ubicado en Trujillo.
Martín Namay Valderrama, gerente general del Gobierno Regional, indicó que ya se cuenta con un terreno casi totalmente saneado y que se trabaja en coordinación con el Ministerio de Justicia y la Superintendencia de Bienes Estatales (SBN) para concluir los trámites pendientes. Según Namay, se espera que en un plazo de 30 a 45 días se finalice el proceso legal para que el predio pase oficialmente a manos del Ejecutivo.
El nuevo penal estará situado en una zona remota, a más de 4 mil metros sobre el nivel del mar, entre los distritos andinos de Quiruvilca y otro aún no especificado, en la provincia de Santiago de Chuco. De las 200 hectáreas disponibles, se emplearán inicialmente 20 de propiedad estatal. El acceso será por una vía carrozable tipo trocha, lo que garantiza su aislamiento, similar al modelo del penal de Challapalca, ubicado en Puno.
El lugar fue escogido específicamente por su lejanía de centros poblados, su altitud y las bajas temperaturas, factores que contribuyen al perfil de un penal de máxima seguridad y con menor riesgo de conflicto social en la zona.
Penales colapsados
El penal El Milagro de Trujillo, diseñado para 2,000 reclusos, alberga actualmente a más de 5,000 internos, reflejando la grave crisis de hacinamiento en las cárceles del país. Para aliviar esta situación, el Gobierno Regional de La Libertad anunció la próxima construcción de un nuevo penal de alta seguridad en la sierra liberteña, a más de 4,000 m s. n. m., entre los distritos de Quiruvilca y Huaso. El establecimiento será similar al de Challapalca y busca descongestionar el sistema penitenciario regional.