La maternidad es un hecho biológico incuestionable con directos efectos jurídicos, qué duda cabe. Coloca al embarazo y al parto en eventos de gran importancia y de atención legal para su principal protagonista: la madre; y, esencialmente, en cuanto al tema de este artículo, a la madre trabajadora. Hoy la madre trabajadora goza de 98 días de licencia por maternidad y no cabe discutir su importancia, antes y después del embarazo.1
Pero eso no nos ocupa, sino la licencia por paternidad, la misma que se ha ido incrementando primero de 4 días (Ley 29409), luego a 10 días (Ley 30807) y, con la aprobación del Congreso, en marzo del 2024, del dictamen recaído en los Proyectos de Ley 1330/2021-CR y otros se ha ampliado esta licencia a 15 días en favor del padre trabajador. De acuerdo con el dictamen, esto se fundamenta en el objetivo de promover el desarrollo del núcleo familiar con base en los valores y protege los derechos de los padres trabajadores.
Este artículo no intenta discutir la diferencia entre los días de licencia para uno y otro progenitor, en razón del embarazo, que, por lo demás, es una obviedad; sino ilustrar y recrear –como lo hace magistralmente el desaparecido polígrafo Marco Aurelio Denegri– que la covada es una antiquísima costumbre de muchos pueblos en el mundo que da cuenta de una suerte de imitación del parto a cargo del padre. Esto acentúa su paternidad y genera la privación de una serie de alimentos y actividades, en largo tiempo, en pos de proteger a la cría recién nacida.
Entre los Gabilíes (caribes) de Cayena, el hombre debe tenderse en una hamaca y someterse a un riguroso ayuno de seis meses, por cuya razón adelgaza tanto. Cumplido el medio año y al abandonar la hamaca, muestra una impresionante flacura (Poliantea, pág.160) y el padre yacente ya no pesca ni caza ni sale en expedición guerrera. Él se abstiene de tales y cuales comestibles y bebestibles; y así vela por la salud, por el bienestar de la prole (pág. 164).
Vale la pena abordar si esta licencia por paternidad, que no es otra cosa sino la visión moderna de la covada, debe ampliarse por más de 15 días.
SOBRE EL RASTRO no se solidariza con las opiniones de nuestros columnistas
- Augusto Ruidías Farfán es juez superior titular de la Corte Superior de Justicia de La Libertad ↩︎