Un suboficial de la Policía Nacional del Perú (PNP), identificado como G.I.S.J. (29), presentó una denuncia en Trujillo luego de ser extorsionado mediante amenazas a través de mensajes de WhatsApp. Los delincuentes le exigieron la suma de S/50 mil a cambio de no hacerle daño a él ni a su familia, lo que generó alarma en las autoridades.
Amenazas
El incidente fue reportado a la División de Investigación Criminal de Extorsiones (Depincri), que ha comenzado una investigación exhaustiva para identificar a los responsables y establecer si están vinculados a alguna red criminal que opere en la ciudad. Los investigadores están trabajando para rastrear los mensajes y determinar el alcance de esta organización delictiva, que parece haberse diversificado en sus métodos de extorsión, afectando incluso a agentes de la ley.
Este caso destaca un fenómeno preocupante: el crimen organizado en Trujillo ha pasado de atacar principalmente a empresarios y comerciantes a extender su alcance hacia las fuerzas de seguridad, quienes, paradójicamente, están encargadas de enfrentar estas amenazas. El aumento de la extorsión y otros delitos violentos ha sido un tema recurrente en la región, lo que refuerza el sentimiento de vulnerabilidad entre la población.
En el año 2024, la región de La Libertad registró más de 4,500 casos de extorsión, colocándose entre las más afectadas por este delito en el país. Pese a los esfuerzos por promover la denuncia de estos crímenes, el temor sigue siendo uno de los principales obstáculos para que las víctimas busquen justicia, lo que permite que las bandas criminales sigan operando con impunidad en muchas zonas.
En investigaciones
El Ministerio Público ya se encuentra involucrado en el caso, y se están evaluando medidas de protección para el suboficial y su familia, dada la gravedad de las amenazas recibidas. Las autoridades están considerando posibles cambios de residencia o protección policial adicional para asegurar la integridad del denunciante.
Trujillo, una de las ciudades más grandes y dinámicas del Perú, se ha visto afectada por un aumento alarmante de crímenes relacionados con extorsiones, secuestros y otros delitos violentos. De acuerdo con datos de la Policía Nacional, en los últimos años las denuncias por extorsión han tenido un crecimiento exponencial, reflejando una crisis de seguridad que afecta tanto a la ciudadanía como a las instituciones encargadas de la ley.
Situación preocupante
La situación ha generado un clima de desconfianza y preocupación en la población. Según una reciente encuesta, el 88.7% de los habitantes de La Libertad consideran que la seguridad empeorará en el futuro cercano, lo que demuestra la gravedad del problema. La expansión del crimen organizado en la región está afectando no solo a los sectores más vulnerables, sino también a aquellos encargados de defender la ley, revelando la magnitud de la amenaza que enfrentan las autoridades y la ciudadanía.