En medio de la crisis penitenciaria que atraviesa el Perú, comuneros y rondas campesinas del distrito de Quiruvilca, ubicado en la provincia de Santiago de Chuco, manifestaron su firme rechazo a la construcción de un penal de máxima seguridad en el caserío El Sauco. El proyecto es impulsado por el Gobierno Regional de La Libertad, bajo el argumento de que ayudaría a descongestionar los penales de Trujillo, especialmente El Milagro, donde el hacinamiento ha alcanzado niveles críticos.
Durante una asamblea comunal realizada el 17 de junio, las rondas campesinas acordaron emitir un pronunciamiento dirigido al gobernador regional, César Acuña Peralta, en el que rechazan la obra. Argumentaron que jamás se les consultó sobre este proyecto y advirtieron que su ejecución podría significar el desplazamiento de familias, afectación directa a cultivos, pastos para el ganado y alteración del ecosistema de altura.
“El caserío El Sauco es territorio productivo. Aquí vivimos de la agricultura y la ganadería. No permitiremos que se construya una cárcel sin antes consultar a quienes habitamos esta tierra”, manifestaron los dirigentes locales.
Crisis carcelaria
La construcción del penal responde a la urgente necesidad de enfrentar el colapso del sistema penitenciario. Solo en La Libertad, el penal El Milagro alberga a más de 6,000 internos, cuando su capacidad máxima es de 1,150, lo que representa un hacinamiento del 500%. Según datos del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), el hacinamiento a nivel nacional supera el 136%, con más de 98,000 internos en cárceles que apenas pueden albergar a 41,000 personas.
En el caso de La Libertad, se estima que el 70% de los reos cumplen condenas por delitos graves como homicidio, extorsión, sicariato y tráfico de drogas, muchos de los cuales continúan dirigiendo redes criminales desde prisión. La propuesta de trasladar internos a penales de altura, como el que se pretende construir en Quiruvilca, busca precisamente romper esos vínculos.
Precedentes
Esta no sería la primera vez que el Estado plantea construir penales de alta seguridad en zonas alejadas. Modelos similares ya existen en Challapalca (Tacna) y Cochamarca (Pasco), ambos ubicados a más de 4,000 msnm, en condiciones geográficas y climáticas extremas que dificultan las fugas y comunicaciones clandestinas.
Sin embargo, estos penales han sido cuestionados por organismos defensores de derechos humanos debido a las condiciones hostiles para los internos. Organismos como la Defensoría del Pueblo han señalado que las prisiones en zonas altoandinas deben cumplir estrictamente con estándares internacionales de derechos humanos, algo que en varios casos no se ha respetado.
Reacciones locales
Las rondas campesinas señalaron que están dispuestas a defender su territorio si no se respeta el derecho a la consulta previa. “Nosotros no estamos en contra del desarrollo, pero primero deben escucharnos. No aceptaremos imposiciones”, señalaron en su pronunciamiento.
Hasta el momento, el Gobierno Regional de La Libertad no ha emitido un pronunciamiento oficial en respuesta al rechazo comunal. Se espera que en los próximos días se convoque a reuniones entre representantes comunales, autoridades locales y funcionarios regionales para abordar el tema.
Mientras tanto, la tensión crece en la zona y los comuneros advierten que podrían realizar movilizaciones si el proyecto continúa sin consenso.
Concepto | Cifra | Observación |
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Capacidad del penal El Milagro (Trujillo) | 1,150 internos | Capacidad oficial del recinto |
Población actual penal El Milagro | 6,000 internos | Hacinamiento del 500% |
Hacinamiento a nivel nacional | +136% | Más de 98,000 internos en todo el Perú |
Capacidad total nacional | 41,000 plazas | Infraestructura insuficiente |
Internos por delitos graves (La Libertad) | 70% | Homicidios, extorsión, sicariato, narcotráfico |