Un nuevo crimen en plena vía pública sacudió la noche del viernes al distrito de El Porvenir. Un conductor de colectivo fue brutalmente asesinado a balazos mientras se encontraba a bordo de su vehículo, pese al estado de emergencia que rige en la provincia de Trujillo.
La víctima fue identificada como Paul Otiniano Miranda, quien realizaba su jornada habitual al volante de un automóvil de servicio informal, cuando fue sorprendido por dos sujetos armados que se desplazaban en una motocicleta.
El ataque ocurrió alrededor de las 8:10 p.m., cerca del Parque de las Banderas, en el sector Víctor Raúl I etapa. Testigos relataron que los agresores se aproximaron al vehículo y, sin mediar palabra, abrieron fuego directamente contra el conductor. Se escucharon al menos seis disparos, los cuales perforaron el parabrisas y la ventana del piloto, alcanzando mortalmente a Otiniano.
Vecinos y transeúntes vivieron momentos de pánico al presenciar la violenta escena. Algunos pasajeros que se encontraban cerca del vehículo descendieron en medio del caos y buscaron refugio para evitar ser alcanzados por los proyectiles.
No sobrevivió al ataque
La víctima fue auxiliada de inmediato por una mujer y otros ciudadanos que lo trasladaron en un intento desesperado al Hospital Santa Isabel del distrito. Lamentablemente, los esfuerzos fueron en vano: el conductor falleció poco después de su ingreso debido a la gravedad de las heridas.
Investigación en curso
Personal de la División de Investigación Criminal (Depincri) Trujillo Este llegó al lugar del crimen para iniciar las diligencias correspondientes. Se presume que el móvil del asesinato estaría vinculado a amenazas o extorsión, modalidad que viene afectando a decenas de transportistas en la región.
Hasta el cierre de esta edición, no se han reportado detenciones, pero las autoridades analizan cámaras de videovigilancia cercanas para identificar a los responsables.
Este nuevo hecho de violencia refuerza la preocupación por la ineficacia de las medidas de seguridad implementadas durante el estado de emergencia en Trujillo, donde los crímenes a mano armada no cesan.