La región La Libertad enfrenta serias consecuencias económicas debido al paro indefinido promovido por trabajadores mineros informales y respaldado por las rondas campesinas de Pataz. Según estimaciones del Colegio de Economistas regional, la paralización estaría generando un daño diario de aproximadamente 35 millones de soles.
El economista Francisco Huerta Benites, decano del gremio, explicó que el bloqueo de carreteras y la interrupción de actividades comerciales y logísticas provocarán un encarecimiento de alimentos y una disminución del poder adquisitivo, golpeando directamente a los hogares con menos recursos. “Los más pobres son quienes sufrirán el mayor impacto”, advirtió.
Desde las organizaciones ronderas se anunció que la entrada y salida a la provincia de Pataz será cerrada, aunque se permitirán ciertos vehículos en horarios limitados. Así lo afirmó Santos Quispe Alvarado, presidente de la Central Única Provincial de Rondas Campesinas, quien detalló que solo podrán transitar ambulancias, unidades con productos de primera necesidad y transporte de pasajeros, pero no camiones vinculados a la minería.
Hasta el cierre de esta edición, el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) reportó que continúan bloqueadas las vías Shorey Alto (Santiago de Chuco) y Pampa La Julia. Asimismo, en la provincia de Sánchez Carrión, al menos 300 manifestantes mantienen obstruida la carretera Corrales – Aricapampa, complicando el tránsito en la zona andina.
Huerta exhortó al Gobierno a tomar decisiones firmes frente a este conflicto, señalando que la legalidad no puede ceder ante presiones violentas. Según el economista, las protestas responden al descontento por la vigencia del Decreto Supremo N.° 012-2025-EM, que fija como plazo final de formalización minera el mes de diciembre de este año.
“La institucionalidad del país no puede depender de quién grita más fuerte ni de bloqueos que paralizan regiones enteras”, puntualizó.