El sitio arqueológico de Chan Chan, en Trujillo, sufrió un nuevo atentado contra su valioso legado cultural. Un video difundido en redes sociales muestra a un joven pintando con aerosol una figura obscena sobre uno de los muros originales del complejo, mientras otro sujeto graba la escena. Las imágenes, tomadas a plena luz del día, generaron rechazo inmediato entre ciudadanos y autoridades.
Según constató Sobre el Rastro, que acudió al lugar tras la viralización del video, no se trató de un hecho aislado. En la misma zona —cercana al museo de sitio— se hallaron otros tres grafitis, uno de ellos con los nombres “BORIS Y MYM” y otro con la inscripción “Sparta Force”. También se observó basura acumulada y vegetación seca, en un área que debería estar bajo constante vigilancia por su valor histórico.



La Dirección Desconcentrada de Cultura de La Libertad condenó el atentado y dispuso la intervención inmediata de su equipo técnico para restaurar el muro afectado sin comprometer su integridad. “Este acto representa una grave ofensa contra el patrimonio cultural de todos los peruanos”, indicó la institución en un comunicado.

Mientras tanto, la Policía y el Ministerio de Cultura trabajan para identificar al autor del video, publicado desde una cuenta con el nombre “Marcofer” o “Marcos Fernández”, cuyo origen aún se investiga. Se han detectado al menos cuatro coincidencias con ese nombre en la ciudad, incluidos dos menores de edad.
El artículo 226 del Código Penal peruano establece penas de hasta seis años de cárcel para quienes dañen sitios arqueológicos. La DDC ha adelantado que evalúa iniciar un proceso penal contra los responsables. Además, anunció una campaña de sensibilización en escuelas y comunidades aledañas a Chan Chan, para reforzar el cuidado del patrimonio.